Una isla autosuficiente en Nueva Escocia, Canadá, es el proyecto que decidió poner en marcha el estudio de arquitectura BIG en colaboración con la compañía de diseño británico Vollebak y la firma de arquitectura local FBM.

Situada a 400 metros de la costa de Nueva Escocia, en el puerto de Jeddore, y a 50 minutos de la ciudad canadiense Halifax, la isla Vollebak acogerá una ‘Casa de la Tierra’ de 597 metros cuadrados que constará de nueve edificios interconectados.

En las 4,5 hectáreas de Vollebak Island cobrará vida un complejo neutro en emisiones de carbono y totalmente aislado de la red eléctrica. Se abastecerá mediante una combinación de energía eólica marina, geotérmica y solar que tendrá la capacidad de almacenarse en muros eléctricos Tesla.

La isla afincada en Canadá presentará un vínculo estrecho con materiales de construcción naturales, innovadores y alimentados con energía neutro en carbono, como son las algas marinas, el hormigón de cáñamo y el hormigón impreso en 3D.

“La isla Vollebak está diseñada para ser un ecosistema extraordinario hecho por el hombre en el que todo lo que necesitas para vivir está en la isla. Esperamos que la isla Vollebak sea comprada y construida por alguien que comparta la visión que hemos creado: alguien a quien le entusiasme ver toda su energía generada a la vista por el sol, la tierra, el viento y el suelo que le rodean, y que quiera ver crecer sus cultivos en su invernadero y en los tejados plantados de todos los edificios. Al mismo tiempo, también es una prueba de concepto del Plan para el Planeta de BIG”, expresó Steve Tidball, cofundador de Vollebak, en una entrevista.

La ‘Casa de la Tierra’ creará espacios abiertos para socializar, permitiendo así que la naturaleza se entremezcle con la arquitectura. Como puerta de entrada a la isla, el salón-comedor concebido de paja resistente a la intemperie y aislante natural, será un espacio central de reunión para cocinar, comer y relajarse en torno a una gran hoguera vikinga de seis metros.

Los residentes y huéspedes podrán dormir en una de las cuatro habitaciones hechas de hormigón de cáñamo ignífugo, hormigón impreso en 3D o roca natural.

En tanto que las actividades de ocio incluyen disfrutar de una casa de baños de estilo japonés con bañeras excavadas en el lecho rocoso, contemplar una vista de la galaxia en la sala de observación de estrellas o distenderse en un espacio de meditación, un invernadero enteramente de ladrillo de vidrio se encargará de cultivar alimentos en la isla.

Además de la Casa de la Tierra, estará la ‘Casa de Madera’, una residencia independiente de dos dormitorios y dos baños con un exterior de madera de la isla, esencial para las condiciones climáticas extremas. La fachada podrá abrirse y cerrarse a la orilla del mar, mostrando una amplia vista triangular de ocho metros sobre el agua.

¿Cómo podrías comprar la isla si estás pensando en mudarte a la naturaleza? Vollebak Island se subastará a través de Sotheby’s Concierge Auctions, en colaboración con Scott y Angie Bryant, de Sotheby’s International Realty Canada. La puja en línea comienza el 8 de junio, y culminará en persona el 14 de junio en Sotheby’s New York.

Los posibles compradores competirán por la oportunidad de poseer la isla y obtener los derechos de la visión del diseño, los derechos de propiedad de la isla y los permisos de planificación (la fecha final de construcción dependerá del comprador de la isla).

Bajo el sello de tres compañías con la mirada puesta en el futuro, la isla contribuirá a fomentar la conexión más estrecha posible con la naturaleza, en un modelo donde la playa, los bosques, los acantilados, los paisajes y las puestas de sol formarán parte de la casa de la isla Vollebak.

Yuniet Blanco Salas

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