A pesar de que la mayoría de las personas sueña con hablar varios idiomas, es un recorrido que requiere tiempo, paciencia y dedicación. Algunos ciudadanos tienen más facilidades, porque viven en países que brindan la infraestructura perfecta para apoyar el estudio de una lengua nueva.
Aprender un segundo idioma tiene ventajas competitivas en el mercado laboral. Preply, plataforma de aprendizaje online, comparte los datos más interesantes de un estudio que analizó a los mejores países para aprender un segundo idioma.
Algunos ciudadanos tienen más facilidades, porque viven en países que brindan la infraestructura perfecta para apoyar el estudio de una lengua nueva. Descubre cuál qué país se rankea en primer lugar.
Los datos finales revelan que Luxemburgo es el mejor país para aprender una lengua nueva, seguido por Suecia y Dinamarca. En Luxemburgo el 100 % de los niños comienza a aprender lenguas extranjeras en educación primaria, en comparación al 94 % de los niños en Suecia.
Los Países Bajos lideran el porcentaje de hogares que tienen acceso a Internet, con un total del 98 %, en comparación al 90 % de Francia y el 87 % de Polonia.
Alemania ocupa la 11ª posición en el índice, aventajando a España en el 12º lugar, Francia en el 23º e Italia en el 26º. A pesar de que muchos más niños aprenden un idioma extranjero en las escuelas de educación primaria en Italia y Francia en comparación a Alemania, el nivel de competencia del segundo idioma de los alemanes es mucho mayor, al igual que el número de lenguas habladas.
Los países con más idiomas oficiales son Luxemburgo, Bélgica y Finlandia. En el primero las lenguas oficiales son el luxemburgués, francés y alemán; en Bélgica son el holandés, francés y alemán, y en Finlandia el finlandés y el sueco.
Crecer aprendiendo varios idiomas ofrece múltiples ventajas, como la posibilidad de comunicarse con personas de otros países y potenciar el razonamiento estratégico cognitivo.
Las personas que hablan más de un idioma también tienen ventaja al aprender una lengua nueva en el futuro, porque cuantos más idiomas hables, más fácil es aprender uno nuevo.
Ver la televisión es una de las formas más fáciles para aprender un idioma: los subtítulos son una herramienta particularmente útil para consolidar el aprendizaje de idiomas, ya que requieren que el espectador participe para realizar una conexión entre sonido, texto e idioma. Se ha demostrado que esto fomenta la retención y acelera el dominio de una lengua extranjera.
Este estudio se ha desarrollado gracias a un análisis detallado de los 27 países de la Unión Europea que ofrecen el mejor entorno para el aprendizaje de idiomas. Para ello, han analizado 18 factores repartidos entre siete grupos, entre los que se incluyen: el grado de multilingüismo, el porcentaje de niños que aprende un idioma extranjero en educación primaria, el nivel de competencia en una segunda lengua, entre otros.
Yuniet Blanco Salas